Musicoterapia, la disciplina que transforma vidas y potencia el crecimiento personal

* Una práctica que va más allá de la relajación, ofreciendo claves prácticas para el bienestar y la creatividad diaria.

* David Caycedo Galvis, Magíster y Fundador - CEO de Aguanta la Música, comparte su visión y experiencia.

En la búsqueda constante de herramientas para el bienestar y el desarrollo humano, la musicoterapia emerge como una disciplina cada vez más relevante y con un potencial transformador. Lejos de ser un mero acompañamiento sonoro, esta práctica profesional utiliza la música de forma estructurada para alcanzar objetivos terapéuticos individualizados, impactando positivamente en la salud mental, emocional y cognitiva de las personas.

Para David Caicedo Galvis, Magíster en Musicoterapia y Fundador - CEO de Aguanta la Música, compañía líder en este tipo de terapias en Colombia, la musicoterapia no se limita a la escucha pasiva. "Es una disciplina que utiliza la música con objetivos terapéuticos". Su eficacia está, además, sólidamente respaldada por la ciencia: un reciente estudio publicado en Frontiers in Psychology (Vol. 16, 2025), que analizó una amplia gama de investigaciones, concluyó que la musicoterapia es significativamente efectiva en la reducción de síntomas de estrés, ansiedad y depresión, lo que subraya su creciente reconocimiento en el ámbito de la salud mental.

Tres claves de la musicoterapia para un mejor día a día

David Caycedo de Aguanta la Música sostiene que la musicoterapia ofrece herramientas tangibles que cualquiera puede integrar en su vida para fomentar el crecimiento personal y el bienestar cotidiano. Estas son tres claves fundamentales:

1. Conectar con el disfrute estético: Se trata de ir más allá de la escucha pasiva. La musicoterapia invita a una conexión consciente y profunda con la música, permitiendo que esta experiencia sonora se convierta en un ancla para el presente, fomentando la apreciación y el goce.

2. Experimentar creativamente y de forma activa: La musicoterapia anima a la expresión personal a través de la música, y no solo mediante la escucha.

Actividades como escribir un coro, improvisar con sonidos o cantar, se convierten en vías para canalizar emociones, facilitar la catarsis y explorar nuevas facetas de uno mismo de manera segura y constructiva. Como explica Caycedo: "Aquí, en musicoterapia, es como un psicólogo que está uno a uno contigo, haciendo preguntas, intervenciones, aplicando técnicas, proponiendo experimentos, solo que todo con música".

3. Realizar una curaduría musical consciente: Implica elegir la música de forma intencionada, reconociendo su impacto en los estados de ánimo. La musicoterapia enseña a seleccionar melodías que no sólo acompañen, sino que ayuden a transicionar entre diferentes emociones, promoviendo un uso estratégico de la música para el fortalecimiento personal y la prevención del malestar.

En definitiva, la musicoterapia se posiciona como un poderoso aliado para quienes buscan ir más allá del alivio sintomático y aspiran a un desarrollo personal profundo. Sus claves, basadas en la conexión consciente con la música, la expresión creativa activa y la curaduría intencionada, ofrecen un camino validado científicamente para gestionar emociones, fomentar la creatividad y potenciar el bienestar general. Este enfoque es fundamental para individuos y profesionales que buscan nuevas herramientas para el día a día.

Compañías como Aguanta la Música están liderando la aplicación de esta disciplina, ofreciendo experiencias interactivas y transformadoras para el crecimiento personal y el bienestar organizacional.