
Juan K LiBre
BOHO Food Market
Un año no es solamente el paso de días, semanas y meses, el lento discurrir de un
tiempo en las páginas de un almanaque. Un año es un cúmulo de vivencias diarias
que se impregnan de emociones y sensaciones, de experiencias y novedades.

Y justamente eso es lo que el primer aniversario de Boho Food Market significa: 365
días de sabores y colores, 365 oportunidades para enamorarse del diseño y de la
cocina de distintos rincones del mundo, 365 amaneceres de productores
colombianos reunidos en un mismo sitio y ofreciendo lo mejor del talento nacional.
Eso es Boho Food Market: una excusa diaria para enamorarse de la comida, la
bebida y el diseño.
Lo que nació en 2018 como un emprendimiento inspirado en las tradicionales plazas
de mercado y en los vanguardistas mercados europeos, es hoy, un año después,
un concepto que más de cien mil visitantes han disfrutado. La clave de este éxito
puede encontrarse en la naturalidad con la que Boho Food Market amalgama
diversos conceptos para potenciarlos y complementarlos entre sí.
Así, por ejemplo, el primer nivel de Boho es un mercado en el cual se pueden
encontrar siempre ingredientes frescos, naturales y nutritivos. Frutas jugosas,
carnes exquisitas, aceites saludables, verduras variadas, granos esenciales para
cualquier dieta y un sinfín de productos comestibles que se exhiben en los estantes
con la pulcra belleza de cualquier galería de arte (la simetría de la disposición, el
encadenamiento de los colores según su gama cromática, la limpieza y el mimo de
la iluminación). Además, para asegurar la calidad se hace un riguroso proceso de
curaduría donde se analizan factores como el sabor, la textura, la manera en la que
se complementa con los demás productos, la rentabilidad y la acogida por parte del
público.
Sin embargo, el mercado no solamente empieza y termina en sí mismo. Al igual que
provee de productos de primerísima calidad a los visitantes, también abastece a los
restaurantes que hacen presencia en Boho Food Market. En total son 21 módulos
gastronómicos los que se pueden encontrar en Boho. Un caleidoscopio de sabores
conformado por restaurantes de comida asiática, mexicana, italiana, peruana y,
como no, colombiana. También hay opciones veganas y otros espacios para vinos,
cervezas artesanales, charcutería, gelatería, panadería y bizcochería. Delicias para
disfrutar y compartir y que se realizan con los mismos ingredientes que cualquiera
puede comprar en el mercado.
Esta apuesta gastronómica en la que la comida no solo se cocina, sino que también
se diseña, se completa con el espacio dedicado al diseño y la creatividad: Boho
Expo. Y es que, si la culinaria es una forma de diseñar, diseñar es una forma de
cocinar: necesita de mimo, de los ingredientes necesarios, de una mano experta y
de las herramientas necesarias para crear obras únicas. Boho Expo es un espacio
que se abrió con el fin de exhibir, apoyar y potenciar el diseño nacional. De este
modo, y cruzando la plazoleta de Boho, se llega a este lugar en el que hay alrededor
de 130 diseñadores 100% colombianos.
Desde prendas de vestir hasta bisutería y joyas, desde muebles hasta decoraciones
para el hogar, desde curiosidades hasta marroquinería, en Boho Expo hay siempre
un antojo distinto, una textura nueva, una técnica artesanal sorprendente y un
diseño hecho a la medida de cada quien. Entre los 130 diseñadores, hay nombres
de marcas como Hernán Zajar, Paola Turbay, Ochocinco, Pepita Mendieta, Allure,
Bissoni, Deusk, Fernanda Arias, Liliam Medina, Mohan, Tucurinca, Zut, etc. Un
conjunto de apuestas entre los que hay nombres establecidos y otros emergentes,
uniéndose así diferentes generaciones de diseño en un mismo lugar.
Planes de expansión
Tras un año de éxitos y apuestas, tras 365 días de aprendizajes y trabajo, Boho
Food Market está en busca de nuevos horizontes y latitudes. Local, nacional e
internacionalmente el negocio desea ampliar su presencia, pero manteniendo su
esencia en la que tradición y vanguardia se entremezclan en un concepto único.
Sobre esto, Camilo Ayerbe, director de Boho, afirma que “la acogida que ha tenido
este modelo de negocio en Bogotá abre nuevos espacios para expandirse a nivel
nacional e internacional a ciudades como Medellín y Cartagena, y fuera del país,
como por ejemplo a Panamá. Adicional, en noviembre de 2018 se lanzó el e-
commerce, una plataforma de comercio transversal que permite comprar productos
entre los Boho de distintos lugares, lo cual promueve los talentos de diseñadores
de los países y ciudades mencionados”.
A nivel local, Boho abrirá en la carrera 4 con calle 17, en pleno corazón capitalino,
un lugar dedicado exclusivamente a la gastronomía; por su cercanía a universidades
y al epicentro turístico de la ciudad, se espera atraer a unos 1.500 comensales
diarios. También se abrirá un Boho Food Market en el sector la Macarena, al lado
del Museo Nacional, y que replicará el concepto del original. Finalmente, se proyecta
un tercer Boho en Chapinero, en la calle 65 con carrera 7, y cuyo principal atractivo
radica en el hecho de que estará en una estructura histórica, conservando la
construcción mediante un proceso de remodelación, y donde habrá restaurante,
mercado y expo. Estos nuevos puntos se abrirían en el transcurso del tiempo hasta
el 2021.
En cuanto al resto del país, Medellín y Cartagena serían las siguientes ciudades en
disfrutar del concepto Boho. La idea es llevar a estos territorios lo mejor de los
sabores nacionales e internacionales, respetando las idiosincrasias locales y
ayudando a potenciar el atractivo turístico de la ‘Ciudad de la eterna primavera’ y de
‘La heroica’.
Finalmente, los planes de expansión de Boho a otros países se comenzarán a
materializar en junio de 2020 con la apertura del punto en Panamá. De la mano del
grupo inmobiliario Durex Property Group, desarrolladores del Panamá Design
Center, Boho estará en los últimos dos pisos del proyecto, incluida la terraza, con
una maravillosa vista al mar y un clima incomparable, para innovar con su modelo
comercial, priorizando los productos panameños y ofreciendo muestras periódicas
de los productos colombianos, en primera instancia, y en la medida que se integren
otros países, se podrán comercializar alimentos y artículos de otras latitudes.
Posteriormente, la marca contempla ingresar a Costa Rica y otros países, donde ya
se están haciendo estudios de mercado.